13 de diciembre de 2007

De tertulia con...

Hemos estado de tertulia en clase con algunas madres. Por supuesto, el tema ha sido la lectura y el papel que ésta ocupa en nuestra rutina diaria.
Ha sido una conversación distendida que ha empezado con la proyección de unas imágenes (el típico truco para amansar a las fierecillas de 1º de ESO e introducirlos en materia). Después, se han ido sucediendo las palabras. Alternativamente, se han ido intercambiando opiniones sobre el disfrute de la lectura. Una madre nos ha traído sus libros preferidos. Es una fan de Ken Follet (ha levantado mucha admiración saber que es capaz de leerse esos mamotretos). Otra ha reconocido que ella es lectora gracias a los cómics que en su adolescencia la apasionaban (con esta declaración, muchos se han sentido aliviados). Otra ha confesado que, por falta de tiempo, ahora sólo puede leer la prensa, pero que en otras épocas devoraba los libros con pasión. Otra, que también se lee los libros que la escuela manda leer a sus hijos (curiosamente, ¡le encantan!).
También han hablado los alumnos. Por ejemplo, Ana nos ha contado cómo la ha impresionado la lectura de Los secretos del fuego de Henning Mankel. Carla ha reseñado los tres libros que lleva leídos en lo que va de trimestre y cómo Relato de un náufrago la ha tenido enganchada hasta el final.
Y también ha habido ausencias. Una madre no ha podido asistir, pero ha delegado en su hija la lectura de una nota manuscrita. La hemos leído envueltos en un silencio amable.

No me acuerdo de en qué momento empecé a tener consciencia de lo que significaba leer. Leer no es única y exclusivamente coger un libro y acabarlo. La lectura es algo más. La lectura siempre tiene que ser pausada y tranquila sabiendo en cada momento todo aquello que lees, aquello que entiendes en tu interior. Puedes leer periódicos, novelas de amor... no importa. Lo que sea que leas, hazlo queriendo.
Si tenéis la capacidad de leer, tened la seguridad de que sabréis escuchar a los demás. El silencio de la lectura es una guía para el día a día.
                                                                                                                      María Blanco

No va a ser la única visita. ¿No se dice que falta implicación de las familias? A mí se me ha ocurrido que una manera es introducirlos en las aulas. La próxima visita tendrá que ver con el relato de aventuras. En el contexto del estudio de este género narrativo, voy a invitar a los padres para que nos cuenten su aventura personal. No hace falta ser un aventurero para esta misión. Todos vivimos nuestra peripecia diaria. Lo dijo Mercedes Abad en una tertulia a la que asistí el martes y en la que oí esta impagable frase: Tú eres un relato, yo soy un relato, cada uno de nosotros somos un relato.



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8 comentarios:

  1. A veces me llegan comentarios de mis alumnas sobre sus madres: que si se leen los libros que les recomendamos, que si les han gustado o no... La última que recuerdo es la historia de una madre cautivada por la novela Flores en el ático. Es cierto, pero ampliar el experimento y convocar a las madres lectoras es una iniciativa que te honra y que enriquece las posibilidades. ¿Hay padres lectores o la lectura ha quedado -como parece- para las féminas? Sería una pena. Un saludo.

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  2. Sí, Joselu, hay padres lectores. De hecho, esperábamos que viniese uno de ellos, pero tuvo un percance de última hora y se disculpó.

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  3. Tertulia a la que por cierto asistí.
    Brillante Mercedes Abad...
    Lástima que te llevaras el último libro, me quedé sin el. :-)
    Cuando leyó lo del "hijo puta",creo que ahí hizo la venta del libro.
    Buena iniciativa lo de los padres lectores, aunque esa sutileza de comentario sobre la lectura de Ken Follet, Lu, igual te resta voluntarios para tu próxima tertulia....o quizás no.

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  4. Anónimo11:47 p. m.

    Joer, que bonita esa nota que ha escrito al madre ausente.

    seguro que su hija será una gran y apasionada lectora.

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  5. Como ocurre con los calzoncillos de los niños, suelen ser las madres las que compran los libros para sus hijos. Por eso se enganchan a la lectura más que ellos. A veces te dicen: 'no me lo he acabado porque me lo ha quitado mi madre'.
    Me parece una idea estupenda lo de llevar a las madres/padres a esas sesiones de club de lectura. Gracias una vez más.

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  6. Lu, enhorabuena por la tertulia. Es una idea estupenda. Por cierto, ¡qué bonitas te han quedado las fotos!
    Amparo (compañera del Gimp)

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  7. ¡Qué sorpresa, Amparo!
    Hemos aprendido juntas algunos secretos del Gimp y ya ves...

    Gracias por tu visita y buen viaje a Nepal

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  8. Me gusta esta idea de las tertulias. Nosotros intentamos algo después de comer. Se llamaba ¿Y el postre? y de ahí surgió el blog con el mismo nombre. Después de comer leíamos algo breve para acompañar la digestión

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