Semana de encuentros y desencuentros, presentaciones (1)... y también de correcciones, exámenes y juntas de evaluación.
A mí me gusta enseñar, pero no evaluar; aunque ya sé que no existe lo uno sin lo otro. La tarde de juntas fue especialmente intensa, pero si saco a colación el tema es por lo siguiente:
C**** es una alumna muy lista que sufrió un accidente. Hace dos meses que está inmóvil en su casa. No puede asistir a clase, por lo que sus padres solicitaron que el equipo docente proporcionara las tareas a A****, su vecino y también alumno del instituto. Cuando A**** vino a hablar conmigo, le dije que no se preocupara que ya contactaría con C**** por email (antes, me aseguré de que ésta podía conectarse sin problema desde casa).
En todo este tiempo, C**** y yo hemos estado en contacto a través del aula virtual moodle. Hasta ahora ha realizado todas las tareas y, como ya he dicho que es muy lista, va por delante de sus compañeros.
Al iniciar la junta, se comentó el caso. Ha suspendido varias asignaturas (está en 4º de ESO y deseando estudiar bachillerato) por la falta de comunicación entre ella y algunos profesores, que dijeron no haber sido informados (?).
No valen las excusas.
(1) Esta semana estuvimos Ana Romeo y yo en la presentación de las licencias de estudios en el Auditorio del Cosmocaixa (Barcelona). Nuestra participación acabó siendo un acto reivindicativo en el que solicitamos a la Administración un compromiso con la implantación de las TIC. ¡Cómo nos gusta saltarnos el protocolo!
Querida Lu: El alumno siempre está bajo sospecha de ser un vago y un jeta. En las sesiones de evaluación, aparte del repaso a los vínculos familiares de los alumnos durante las últimas tres generaciones, se puede comprobar que algunos profesores han asumido su papel de artilleros de línea del frente y descargan andanadas contra todo estudiante que no responda al modelo 'quecalladoyeducadoquees yloqueestudia'. Y siempre habla el que más tiene que callar (en cuanto a esfuerzo y en cuanto a capacidad).
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminarMe imagino el panorama y me solidarizo con la pobre alumna. En Gavà tenemos un caso parecido y al chavalín (1º de ESO) le han puesto un profesor a domicilio que se tiene que coordinar con el tutor y además le han cedido un ordenador portátil mientras esté enfermo. Todo con papeles por triplicado y con el sello de las diferentes administraciones, eso sí.
Excelente idea la de utilizar Moodle para tal fin. En Navarra tenemos varios casos de chicos y chicas con enfermedades de larga duración que se ponen en contacto con sus compañeros y profesores vía webcam. ¿Habéis probado a utilizar el Skype, por ejemplo?
ResponderEliminarGracias, como siempre, por la recomendación. Y a riesgo de parecer desmesurado en los comentarios, afirmo que este A pie de aula debería ser material obligado del buen docente. Un abrazo. álex.
ResponderEliminarhola. He visitado tu blog y te invito a visitar el mio y espero que te guste
ResponderEliminarhttp://wwwgalberlbloggercom-ana.blogspot.com/
La parte más humana de la tecnología, o sea, la nuestra.
ResponderEliminarSí que estamos peleonas esta semana ... (yo me apunto). Quien no llora no mama ...