Da a tus hijos todas las respuestas es el nombre de una campaña publicitaria lanzada por El País. Se trata de un producto de su factoría (la prensa es también un gran bazar), una enciclopedia visual para niños. La campaña ha llenado las páginas de El País con anuncios a toda página, pero también en varias páginas interiores, con pequeños módulos que actúan de reclamo. En todos aparece una pregunta de corte académico como la de la imagen:
Al margen de la calidad o no de la campaña (dudosa, en mi opinión), el formato se presta a darle la vuelta, a realizar un ejercicio de contrapublicidad mucho más realista. ¿Qué es lo que preguntan los niños? ¿Tienen los padres todas las respuestas?
Confieso que, en un primer momento, cuando estaba preparando cómo introducir el tema a unas alumnas que preparan su trabajo de investigación sobre publicidad, pensé en desmontar la campaña cambiando a los padres por profesores, pero eso se lo voy a dejar a los alumnos. Que pregunten ellos...
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Para saber más sobre contrapublicidad: Consume hasta morir | Contrapublicidad y valores alternativos
Creo que los padres/madres o si lo haces con los profesores...no podrán contestar (no deberían) con chascarrillos y tópicos. A pensar. Saludos Lu.
ResponderEliminarAdemás de otros aspectos, la campaña nos vuelve a demostrar cuál es la visión simplista y decimonónica que se tiene de lo que se hace en la escuela. Preguntas y preguntas de un profesor que detenta el monopolio de la información y examina de conceptos a su alumnado.
ResponderEliminarParece que no ha cambiado nada desde la época de la lista de los reyes godos...
¿No se trata de ayudarles a encontrar, por sí mismos, sus propias respuestas?
ResponderEliminarMañana he planteado la clase de modo que sean ellos los que planteen preguntas que no pienso responder. Habrán de buscar la respuesta colectivamente, colaborando. Valoraré la calidad de las preguntas. Una buena pregunta revela comprensión. No hay peor inquiridor o preguntador que el que no entienda nada. Una buena formación es la que atiende a formular preguntas adecuadas.
ResponderEliminarDe paso he de decir que los libros de la enciclopedia visual son bastante buenos. La hicimos en casa y les ha sido muy útil a mis hijas.
Como apunta Joselu, lo complicado a veces es saberse formular preguntas (no hay más que ver cuánto les cuesta preparar una entrevista, por ejemplo). Por otro lado, no tengo claro el papel de los padres en la resolución de dudas que deberían quedar claras en el aula. El espacio del instituto ha perdido la función de foro de la investigación y el debate y parece que todas las dudas y deberes sean para casa. Es complicado todo.
ResponderEliminarHola a todos (Martín, Biblos, Joselu, Antonio, Blogge@ndo):
ResponderEliminarAl margen de la cuestión de fondo de si los padres deben resolver o no las preguntas de sus hijos o qué preguntas pueden plantearles éstos, lo que quería era hacer un ejercicio de "deconstrucción" de la campaña, para mostrar a unas alumnas qué es la contrapublicidad.
No quisiera cuestionar la validez y efectividad del producto (me alegra oír que vale la pena, Joselu), solo el hecho de que el planteamiento es algo simple. Demasiado simple.
Como apuntáis, en el ámbito educativo debemos enseñar a formular preguntas y los mecanismos para responderlas. Se impone el método antes que el conocimiento, aunque son indisociables.
Tu post es un bonito ejemplo de retorsión. Muchas gracias.
ResponderEliminarJordi, confieso que he tenido que mirar el significado de retorsión. Gracias a ti por el comentario.
ResponderEliminarExcelente ejercicio de deconstrucción, Lourdes. Me gustar muchísimo. Y espero ansiosa las respuestas a las preguntas a los profes. Saludos.
ResponderEliminarBea, he pinchado en tu perfil, pero no está disponible. Supongo que eres Bea, la pionera de los blogs de Lengua. Te echo mucho de menos, que lo sepas. Ahora que parece que los blogs ceden terreno a Twitter, echo de menos el vigor con que me inicié en la blogosfera, allá por 2005. Cuando pienso en esa época. Estás indefectiblemente tú.
ResponderEliminarYo tampoco -lo confieso- conocía el término retorsión, pero me parece perfecto para definir este ejercicio de contrapublicidad. Retorcer, deconstruir, cuestionar, criticar son verbos que conjugan muy bien con enseñar, formar, educar, crecer, razonar...
ResponderEliminarPerfecta actividad, amiga mía, para conseguir todo esto.
Mamá, ¿con qué edad tendré dinero suficiente para comprar una casa e independizarme?
ResponderEliminarPapá, si me esfuerzo y consigo sacara adelante mis estudios, ¿conseguiré trabajo?
El tema, además de ser excelente para abordar la publicidad de una manera creativa, ofrece la posibilidad de trabajar varios temas transversales y de plantear interesantes reflexiones a los alumnos sobre la sociedad actual.
Un saludo, Lu
Encantada de ver que compartes la mayéutica socrática, Lu!
ResponderEliminarmayéutica socrática
(Reconozcamos que estos griegos antiguos tenían sus cosas buenas...:)
Hacía tiempo que no pasaba por aquí y aprovecho a dejaros a ti y a tus lectores un cordial saludo.
Otro ejemplo de contrapublicidad, además relacionado con nuestra profesión: http://eumanismo.blogspot.com/2010/11/respetemos-y-apoyemos-nuestros.html
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